La curación por contacto biomagnético es una nueva técnica terapéutica que utiliza toques muy ligeros para conseguir disminuir el estrés y aliviar el dolor. Existen muchas técnicas de terapia por contacto que, para ayudar al cuerpo a curarse a sí mismo, requieren distintos grados de formación, hacen uso de diferentes niveles de contacto y dependen de diversos estados de conciencia por parte del profesional y de la persona que recibe el tratamiento. Algunas de estas terapias son el reiki, el SHEN, la armonización del aura, el mahikari y el tacto terapéutico.
Se ha escogido tratar de la curación por contacto biomagnético por varios motivos:
- Quizás el más importante es que da buenos resultados, al menos según la mayoría de las personas que la han probado.
Algunos enfermos de diabetes han observado después del inicio del contacto biomagnético una disminución de los niveles de glucosa en sangre, un mejor control de la enfermedad y niveles de estrés significativamente reducidos. - Cualquier persona, al margen de su edad y experiencia profesional, puede aprenderla fácil y eficazmente.
- Le bastarán unas cuantas horas para aprender las técnicas necesarias para tratarse a sí mismo, a su familia y a sus amigos.
- Se puede utilizar con técnicas convencionales o de curación natural.
- Actualmente la utilizan enfermeras y otros profesionales de la salud en países como Estados Unidos y Canadá, y algunas asociaciones de personal sanitario han dado su aprobación para que sea considerada como materia de estudios académicos.
Cómo se utiliza el contacto biomagnético.
Al igual que sucede con otras técnicas de terapia por contacto, no existen pruebas científicas documentadas que muestren cómo o por qué es eficaz la curación por contacto biomagnético.
Los terapeutas titulados en contacto biomagnético aseguran que efectuar un toque ligero en cierta combinación de puntos del cuerpo moviliza y activa sutilmente los propios poderes curativos del organismo. A base de tratamientos repetidos continúa la sanación, y muchos achaques empiezan a corregirse por sí solos. El resultado es un cuerpo que se encuentra en mayor equilibrio y en una armonía más perfecta consigo mismo.
Contacto biomagnético aplicado a la diabetes
La mejor manera de aprender esta técnica de curación es con profesionales diplomados, quienes se lo podrán enseñar todo, desde la Bienvenida — una serie de puntos que se tocan antes del inicio del tratamiento, sea cual sea la razón por la cual se busca ese tratamiento— hasta puntos para tratar enfermedades y achaques específicos, incluyendo la diabetes, la neuropatía, la hipertensión y la cardiopatía. En tan sólo unas horas, aprenderá cómo tratarse a sí mismo.
El contacto biomagnético se puede hacer dedicando unos cuantos minutos en el hogar, la oficina, el automóvil, o mientras se encuentra en la sala de espera del dentista. No obstante, un tratamiento completo, que armonice todo el cuerpo, puede requerir treinta minutos o más.
La curación por contacto biomagnético aplicado a la diabetes.
Según las personas con diabetes que reciben o se aplican ellas mismas contacto biomagnético, éste ha hecho disminuir notablemente sus niveles de estrés, ha reducido su necesidad de tomar antidiabéticos orales, ha reducido la hipoglucemia y les ha mejorado la vista.
Hay quienes también hablan de una mejora de la circulación, una mejor cicatrización de las heridas y una sensación de bienestar. Un hombre que hacía diecisiete años que padecía diabetes de tipo II afirmó: El biomagnetismo me hace sentir que estoy en armonía con todo el mundo.